
Existen grandes debates en torno a si es mejor la guardería para los niños de 0 a 3 años o si es mejor que estén en casa. En mi opinión no hay una única mejor opción.
Hay tres cosas a tener en cuenta: el bebé, la organización familiar y las opciones de los centro infantiles a los que se puede acceder por la zona. En función de las necesidades y características de estos tres elementos, encontraremos el traje a medida para cada uno de nuestros pequeños.
Es una realidad que cada vez los niños van antes a la escuela pero, a pesar de la presión social, no debemos pensar que es siempre la mejor opción.
Las guarderías y posteriormente, los centros de educación infantil, se crearon hace ya varias décadas por necesidad familiar y no tanto por necesidad del bebé.
El hecho de llevarlo a la escuela infantil desde edades muy tempranas es una opción muy respetable y válida para muchas familias. Aunque en algunos casos donde la familia se puede organizar, estar en casa es una buenísima opción.
Sin lugar a dudas, las dos opciones tienen sus ventajas y desventajas, por eso, debemos poner todo en la balanza y decidir.
En casa, respetamos el horario del pequeño, atendemos sus necesidades, potenciamos su desarrollo de forma más particular y evitamos que caigan enfermos muy a menudo.
Dicho esto, creo que es importante tener en cuenta que si decidimos atenderlos en casa es porque realmente queremos y podemos ofrecerle esa atención. Porque nos vemos capaces de darles lo que necesitan y compaginar nuestras obligaciones con su cuidado que no siempre es fácil.
En mi opinión el mejor tándem en la educación es la madre/padre y el bebé.
Sin embargo, hoy en día la situación laboral de la mayoría de las personas no nos permiten cuidar de nuestros pequeños. Además, cada vez hay más centros maravillosos, con grandes profesionales que conocen bien su trabajo y propician un ambiente perfecto para los bebés.
Carmen Romero, psicóloga infantil, experta en estimulación temprana.